Javier Aguirre no deja de lado el abandono de la afición al Tri
La Selección Mexicana derrotó 3-0 a Nueva Zelanda en el primer partido de Javier Aguirre en su nueva etapa en el Tri, sin embargo, el 'Vasco' señaló la escasa entrada en el encuentro

Javier Aguirre dirigió el primer partido de su tercera etapa al frente del Tri y lo hizo con un contundente triunfo de 3-0 ante Nueva Zelanda, un sinodal que si bien no representó mayor exigencia para el conjunto nacional, si logró aportarle al Vasco mayor claridad con respecto a lo que espera del equipo.
Me gustó la actitud, que sin hacer un gran partido el equipo siguió corriendo y metiendo, una gran actitud, no me gustó demasiado juego hacia atrás, muy pausado, pudieron ser más agresivos y hay que corregir cosas en el aspecto defensivo, también tenemos que ser más egoístas en la ofensiva sobre todo si estás frente al portero, no hay que conformarnos, eso no me gustó mucho”, mencionó en la conferencia post partido.
Aguirre reconoció que se enfrenta a la dura tarea de apuntalar al equipo para la Copa del Mundo del 2026, con un limitado grupo de futbolistas con el potencial de ser seleccionables, aunque confía en la llegada de nuevos talentos y el recuperar el nivel de los elementos de jerarquía.
Llegamos en un momento delicado, los últimos tres técnicos manejamos casi los mismos jugadores, hay que potenciar nuestras fortalezas y trabajar en nuestras debilidades. Hay que ir buscando, hay que ver si en estos dos años aparecen nuevos talentos para presentarnos con una selección bien trabajada y pocas debilidades”.
Sobre los trascendidos que apuntan a la ausencia de ciertos jugadores en la convocatoria debido a indisciplinas pasadas, Aguirre fue enfático al señalar que en su gestión hay borrón y cuenta nueva.
No tengo la menor idea de lo que me hablas y hasta hoy es lo primera vez que oigo este tema de indisciplinas y conmigo nadie tiene cerradas las puertas, conmigo no ha habido indisciplinas, yo no heredé nada, ni bueno ni malo, empezamos desde cero y todos tienen las puertas abiertas; la afición es soberana”, comentó Aguirre.
Javier Aguirre habló sobre la necesidad de recuperar la confianza de la afición que no se hizo presente en las tribunas. El Rose Bowl de Pasadena, apenas contó con 25 mil aficionados en las gradas.
La afición es soberana y espera a cambio de su entrada algo. Nosotros empezamos hoy y era poco probable que se llenara un campo como este, pero es el primer paso, en la medida que vayamos haciendo camino, siendo generosos y entregados la gente va a empezar a acercarse nuevamente”.
Para ello, deberán recuperar la escencia del balompié mexicano, esto a decir del mismo estratega.
El mensaje es claro en el aspecto anímico, darle a la gente lo que pide, identificarse con su equipo, un equipo que luche y que pelee. Jugar bien al futbol, hoy era complicado por el ritmo del partido, por el poco entrenamiento, por la humedad y el calor, era demasiado pedir, pero el mensaje era ese”, concluyó.