Mujeres en cárceles cubanas enfrentan violencia, acoso y explotación laboral
De acuerdo con el informe El negocio penitenciario de Cuba las mujeres son obligadas a trabajar pese a presentar enfermedades graves.

Mujeres que se encuentran presas en las cárceles cubanas son forzadas a realizar trabajo en condiciones extremas, enfrentan violencia física y sexual.
De acuerdo con el informe El negocio penitenciario de Cuba, elaborado por la organización Prisoner Defenders, las mujeres son obligadas a trabajar pese a presentar enfermedades graves o condiciones médicas incompatibles con la actividad física.
Destaca entre las mujeres el alto nivel de acoso y violencia sexual. Se constatan actos de personas en estado avanzado de gestación que son forzadas a trabajar”, detalló el reporte presentado a nivel internacional la semana pasada.
De las internas entrevistadas, la mitad reportó haber vivido acoso o violencia sexual, por parte de otros reos y de las autoridades de los recintos penitenciarios.
La ausencia de protección efectiva frente al acoso o la violencia sexual configura una forma agravada de negligencia estatal, contraria al deber de custodia sobre las mujeres privadas de libertad”, criticó la asociación con sede en Madrid.
Asimismo, 100% reveló haber sufrido amenazas personales y haber trabajado bajo condiciones de salud críticas y enfermedades incompatibles con las labores.
Vi una reclusa que se fracturó un pie y le dijeron que si iba al médico ya no podría salir de pase, y ella no tenía opción, era madre de niños pequeños. La jefa del campamento le dijo entonces: ponte fomento y no digas nada” reveló una de las personas entrevistadas en el informe.
Las actividades que realizan las prisioneras son limpieza de hospitales, policlínicos y establecimientos de policías.
Se trata de limpiar los pisos y los baños, sin trapeadores o cubetas. Ellas tienen que conseguir los útiles de trabajo por sus propios medios.
Los baños de esos lugares están muy sucios, llenos de orina y heces fecales, apestan y son foco de virus y enfermedades. Tienen que exprimir trapos empapados de orina sin tener ni guantes para sus manos. Toda una asquerosidad”, detalló el informe.
En el mismo sentido, todas ellas afirmaron que les descuentan de manera arbitraria parte de su salario y la mitad de ellas denunció que trabaja sin contrato laboral.
Las entrevistadas fueron obligadas a realizar trabajos físicamente extenuantes, no adaptados a su condición física ni a criterios de razonabilidad de las condiciones físicas, como el manejo de cargas pesadas, recolección de residuos o labores agrícolas sin herramientas adecuadas”, detalló el reporte del cual fue proporcionada una copia a Excélsior.
EXPLOTACIÓN LABORAL
El pasado 16 de septiembre, este diario publicó que un total de 60 mil presos en cárceles cubanas son sometidos a trabajo forzado, bajo amenazas, violencia y sin protección.