Trabajar en EU será más caro. Donald Trump impone tarifa de 100 mil dólares a visas H-1B para trabajadores especializados

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la imposición de una nueva tarifa para las visas de trabajo H-1B, un programa ampliamente utilizado en sectores como el tecnológico y el científico.
A partir de esta disposición, cada solicitud tendrá un costo de 100 mil dólares, lo que representa un giro drástico en las condiciones de acceso para extranjeros que buscan laborar en la Estados Unidos.
La visa H-1B ha sido durante décadas una de las principales puertas de entrada para ingenieros, programadores informáticos, científicos y otros profesionales altamente calificados.
Estos permisos permiten a trabajadores extranjeros desempeñarse en Estados Unidos bajo el patrocinio de un empleador, con una vigencia inicial de tres años y posibilidad de extensión hasta seis.
¿Cuál es el motivo de esta nueva tarifa a las visas de trabajo?
Desde su primer mandato, Trump dejó claro su objetivo de restringir el programa H-1B, bajo el argumento de proteger a los trabajadores estadounidenses de la competencia internacional.
La nueva tarifa, que multiplica el costo de acceso, busca generar un filtro económico que limite la llegada de extranjeros únicamente a aquellos considerados “extraordinarios” y que realmente no puedan ser reemplazados por personal local.
“Así que se protegerá a los trabajadores estadounidenses, pero garantizará que las empresas puedan contratar a personas realmente extraordinarias y traerlas a Estados Unidos”, señaló Will Scharf, asistente de Trump, al explicar la medida.
El presidente, por su parte, reforzó la narrativa de priorizar el empleo local:
“Necesitamos trabajadores. Necesitamos trabajadores geniales. Y esto garantiza bastante que es lo que ocurrirá”.
De acuerdo con el republicano, su meta es que los empleadores den preferencia a los graduados de las universidades norteamericanas antes de buscar talento fuera del país.
“Si vas a contratar a alguien, será a uno de los recién graduados de una de las grandes universidades de nuestro país. Contratar a los estadounidenses. Dejar de traer a la gente a tomar nuestros trabajos”, enfatizó.
El endurecimiento actual se enmarca en un discurso político que busca reforzar la autosuficiencia laboral en Estados Unidos y reducir la dependencia de trabajadores extranjeros.
Sin embargo, el costo de 100 mil dólares por solicitud podría significar un obstáculo significativo para empresas medianas y startups que tradicionalmente han recurrido a este programa para cubrir vacantes altamente especializadas.
Cabe destacar que tres cuartas partes de los solicitantes aprobados para la visa H-1B son originarios de India, un país que ha nutrido al sector tecnológico estadounidense con miles de ingenieros y especialistas.
Por lo tanto, la nueva tarifa podría tener un impacto desproporcionado en esta comunidad laboral y en las compañías que dependen de su talento.
Con este cambio, Trump no solo limita el acceso al mercado laboral estadounidense para profesionales extranjeros, sino que también envía un mensaje claro: la prioridad está en los trabajadores locales, incluso si eso significa encarecer la competitividad.