Alba Sally Sue Hernández García, la mujer que rompió el tabú en el obispado
La primera mujer al frente de la Diócesis Anglicana de México destaca el avance femenino y afirma que nuestro país mantiene la comunión con la sede primada de Inglaterra

El ministerio religioso era prácticamente un tema vedado para las mujeres. Hace treinta años, en 1994, este tabú se vino abajo cuando la Iglesia Anglicana permitió la ordenación general de mujeres sacerdotes, aunque en México tuvo su primera mujer sacerdote desde 1982.
En 2014, esta iglesia permitió la ordenación de mujeres obispas. Hoy, nuestro país cuenta con su primera obispa, Alba Sally Sue Hernández García, quien está al frente de la Diócesis Anglicana de México desde el 29 de enero de 2022.
En entrevista con Excélsior, la primera mujer en ocupar tal cargo en una prelatura del país expresa su orgullo al recordar que el pasado jueves se cumplieron cuatro años de su elección como obispa, la tarea más importante en su vida.
Disfruto el ministerio episcopal, el ministerio pastoral ¿Es un gozo espiritual, es un gozo emocional? Sí, sí lo es. Llena el corazón, es una alegría, es un gozo que al mismo tiempo se equilibra con la responsabilidad y el compromiso que esto trae.
Portar este color de blusa clerical (morado), con una cruz pectoral, un anillo episcopal. Cuando ocupo las vestiduras episcopales que tienen que ver con un alba sacerdotal, una capa, una mitra, un báculo, es como sentir que no voy caminando sola en esto, que el pueblo está conmigo y es una gran responsabilidad de poder cuidar pastoralmente a todos”, comentó.
Actualmente la Iglesia Anglicana, con alrededor de 85 millones de fieles a nivel mundial, atraviesa por un cisma, luego de la elección el 3 de octubre pasado de Sarah Mullally como arzobispa primada de Canterbury, es decir la primera entre iguales de todos los obispos anglicanos del mundo.
Antes de Mullally, ese cargo de la Iglesia de Inglaterra lo ocuparon 105 hombres, siendo el primero san Agustín, en el año 597. La primera mujer primada de la Iglesia Anglicana es también defensora de la comunidad LGBTQ+.
La cabeza de la Iglesia Anglicana, desde los tiempos del cisma de Enrique VIII con la Iglesia católica, es el monarca inglés. En el ámbito religioso, el principal cargo es el arzobispo de Canterbury, que aun cuando no es equiparable al del papa católico, representa su figura de mayor relevancia.
La elección de una mujer como primada de la Iglesia Anglicana ha provocado un cisma y decenas de obispos, principalmente de África y algunos de Asia, han anunciado su separación Canterbury.
IGLESIA ANGLICANA DE MÉXICO MANTIENE LA COMUNIÓN CON LA SEDE PRIMADA
La obispa de la Diócesis de México, Alba Sally Sue Hernández, anticipó a Excélsior que la Iglesia Anglicana de nuestro país mantiene la comunión con la sede primada e incluso invitarán a Sarah Mullally a visitar México una vez que asuma funciones al frente de la Silla de San Agustín el 25 de marzo de 2026.
Nos complacimos muchísimo con esta noticia de la elección de Sarah Mullally, esta parte de la comunidad anglicana, en las Américas, la Iglesia Episcopal de EU, Canadá, México, Centroamérica, Brasil, en esta transición estamos llamados a algo diferente.
La elección de Sarah Mullally como la 106 arzobispa de Canterbury ha generado reacciones en el sur global de África, ha habido ya como 20 o 30 obispos que han hecho una reacción. Realmente no es por ella, es porque es mujer.
Nuestra postura siempre es abierta y de celebración, estamos dispuestos a trabajar con la arzobispa electa y estamos queriendo invitarla a México y mantenemos nuestra comunión con la arzobispa y con la sede en Canterbury, que nos permite celebrar en esta parte del mundo”, señaló Hernández García.
La obispa Alba Sally Sue Hernández tiene como sede la Catedral Anglicana de San José de Gracia, ubicada en la calle de Mesones 139 en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
El recinto fue construido en 1661, como un templo conventual de la Iglesia Católica Romana, y fue adquirida por la Iglesia Anglicana en 1869, y nuevamente dedicada, ahora para el culto anglicano, el 23 de abril de 1871.
El recinto se adquiere por parte de los misioneros extranjeros para la naciente Iglesia de Jesús y la naciente Iglesia Episcopal Mexicana, en este sentido se adquiere como las propiedades de la Iglesia de Jesús en su momento y es consagrada como Iglesia catedral en 1934.
Hubo una historia que compartimos en este recinto con la Iglesia Católica Romana, con la Iglesia Católica Apostólica no romana que llevó como nombre la Iglesia de Jesús y después al entrar en este diálogo con la Iglesia Episcopal de EU, la Iglesia Episcopal Mexicana en 1904.
Así que, con nosotros, la Iglesia Anglicana nace aquí en México, es decir, no es una iglesia que viene de parte de la colonización y solicitamos ser parte de la Iglesia Episcopal, que es la iglesia que estaba en comunión con la sede de Canterbury.
En 1995 se solicita la autonomía como una provincia y somos recibidos y reconocidos como una provincia autónoma dentro de la Iglesia Anglicana”, relató.
HAY 10 MIL FELIGRESES ANGLICANOS EN MÉXICO
La comunidad anglicana en México cuenta con más de 10 mil feligreses, en su inmensa mayoría mexicanos, aunque en algunas parroquias se oficia misa también en inglés para las comunidades de Reino Unido y EU.
Yo como obispa dirijo una diócesis y la catedral, que es la catedral de la obispa, y me dedico al acompañamiento de la pastoral; en este momento tengo 32 congregaciones, entre las parroquias y misiones en la diócesis.
Mi diócesis abarca la Ciudad de México, junto con seis estados alrededor que son el Estado de México, Hidalgo, Michoacán, Querétaro, Guanajuato y Tlaxcala”, explicó.
Señala que para los anglicanos no causa ninguna extrañeza que una mujer esté al frente de una catedral, oficie misa, imparta los sacramentos, efectúe matrimonios y bautice a los pequeños, y para quienes no forman parte de la iglesia, lo entienden con respeto y atención.
En algunas celebraciones donde hay presencia de otras personas que no necesariamente son anglicanas, debo decir que los comentarios van más hacia la celebración de la liturgia, ellos dicen que les gusta. Hay otros comentarios: wow no sabía que había mujeres en el sacerdocio y que podían celebrar la eucaristía, el bautismo, el matrimonio y los otros ritos sacramentales, ha habido como esta reacción de apertura y de bienvenida”, relató.
EL CISMA EN LA IGLESIA ANGLICANA
Sarah Mullally fue electa como arzobispa primada de Canterbury y de la Iglesia Anglicana el 3 de octubre pasado. Es defensora de las causas feministas y de los colectivos LGBTQ+, lo que le ganó el rechazo de los obispos conservadores de África y algunos de Asia.
La Comunión Anglicana agrupa a unos 100 millones de fieles repartidos en 165 países, principalmente en Reino Unidos y en EU con la Iglesia Episcopal, y pese a la autonomía de cada diócesis todas reconocían la prevalencia del arzobispado de Canterbury como un factor de unidad. Hoy, los disidentes agrupados en la Conferencia Global del Futuro Anglicano dicen representar a más de a 40 millones de anglicanos.
Sobre el nombramiento de Mullally, El Vaticano, a través del cardenal Kurt Koch, prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, expresó: “Rezo para que el Señor los bendiga con todos los dones que necesitan para el ministerio tan exigente al que ahora han sido llamados”.
Sobre el movimiento cismático, el reverendo Laurent Mbanda, actual arzobispo y primado de la Iglesia Anglicana de Ruanda, señaló: “Aunque hay algunos que darán la bienvenida a la decisión de nombrar a la obispa Mullally como la primera mujer arzobispo de Canterbury, la mayoría de la Comunión Anglicana todavía cree que la Biblia requiere un episcopado sólo para hombres”.
La obispa mexicana señaló que cada diócesis está en libertad de tomar una decisión, y la mayoría en el mundo anglicano está a favor de mantener la comunión con Canterbury.
Me parece que por la postura y el contenido de estas reacciones que han publicado, ellos están con una postura muy clara de no tener una relación o reconocimiento de ese instrumento de unidad que es la arzobispa de Canterbury. Lo que estamos esperando, sí, es una separación de estos obispos que han firmado estos comunicados, pero posiblemente no todos, sigue habiendo diálogos, sigue habiendo algunas posturas a tal extremo que sí es seguro que salgan de la comunión anglicana”.



