Kevin Costner llama a la indignación

Violines al estilo Hollywood, como película wéstern, dieron la bienvenida a Kevin Costner al Auditorio Nacional. Todos, hasta las cámaras de la organización de México Siglo XXI, esperaban que el actor apareciera en el escenario tras anunciarse su llegada, pero es Kevin Costner. Vestido completamente de blanco, elegante, sobrio, confiado, salió por la entrada de la zona baja de la sala principal, y con las trompetas comenzó su descenso a la tarima.
Pero no lo hizo directamente hacia ella, se tomó un momento para saludar a los fans, tomarse selfies, dar abrazos, estirar la mano, sonreír y cuando llegó a la tarima comparó el recibimiento de los mexicanos con una entrada al cielo.
Guau, gracias por este recibimiento, creo que la gente debe entrar al cielo y tener un recibimiento como éste para que entiendan qué se siente. Muchas gracias por ir todos estos años a ver estas películas, sé que las películas se han visto en todo el mundo, gracias por la recepción, hicieron que mi corazón se llenara esta noche”, dijo Kevin.
El actor se sentó y no tardó un solo segundo en recordar por qué hace películas, por qué ha producido, escrito, actuado y dirigido y por qué a los 70 años lo sigue haciendo.
Las películas las he hecho pensando en que las veo con ustedes, el cine es un disfrute, cuando vamos al cine sabemos quiénes queremos ser, las películas me ayudaron a saber cómo comportarme de joven, me mostraron el mundo, no hago personajes de los que sea más valiente o inteligente, gracias por ir a ver esas películas”, compartió.
Sin embargo, durante los 40 minutos que charló para los 10 mil becarios de Fundación Telmex, enfatizó en algo, que no sólo es actor, no sólo pertenece a la industria del cine, sino que es como el resto de los presentes, un ser humano, aún con aspiraciones y con preocupaciones como lo son, por ejemplo, el cambio climático o las crisis humanitarias a causa de la guerra, y aprovechó para exhortar a los presentes, en su mayoría jóvenes, a cambiar esa realidad a partir de ahora.
Piensen en el mundo un segundo, todos sabemos de protección al medio ambiente, de la destrucción, de la guerra; muchos sabemos que debemos cuidar el mundo, muchas personas lo saben más incluso que en otros tiempos, pero parece que vivimos en un mundo que parece estar peor, identifiquen lo que les molesta, enójense con eso que creen que es una injusticia, contamos con ustedes. Está bien sentirse molesto, pero que esa molestia los despierte”, insistió el primer actor, ganador de dos Oscar por su película Danza con lobos.
Pero además se concentró en ofrecer vías a los mexicanos, para que quienes aún no encuentran su vocación, su pasión, su propósito en la vida, tengan paciencia, pero, por sobre todas las cosas, sean fieles a eso que aman cuando lo encuentren.
El riesgo más grande no es escuchar nuestra propia voz, sino el latido del corazón. La batalla que tienen ustedes como estudiantes no es con otros estudiantes, es con ustedes mismos, debemos preguntarnos si lo que hacemos es lo que queremos ser, vemos cosas que nos deslumbran, pero para que nos encontremos a nosotros mismos debemos primero conocer lo que amamos”, dijo con firmeza.
Pero enfatizó en algo, nadie puede encontrar su propósito si antes no ha aprendido a ser humano, a relacionarse, a tener principios que él considera importantes y, como buen estadunidense, puso ante todo, primero a la familia.
Soy más que un actor: soy padre, amigo y tengo intereses fuera del cine. Una vez me preguntaron qué pondría en mi tumba y pensé que sería algo sencillo: ‘Además hizo películas’. Porque mi vida es más que la gran pantalla o el dinero; es la familia que creamos. Quiero que la gente entienda que hice más que películas, y que eso es importante, hacer más que lo que amamos, incluso, para poder encontrar lo que amamos”, reiteró.
Un defensor del Western
Pero Costner no sólo defiende los valores tradicionales de vida estadunidense, con Yellowstone, un éxito en streaming u Horizon, aplaudida por 10 minutos en el Festival de Cannes el año pasado, defendió al género wéstern y aseguró que seguirá haciéndolo.
Nadie pensó que sería un éxito. Yo leí el guion solo, no escuché a los que me decían ‘no hagas esto, haz el otro’. Es importante saber qué sienten ustedes, qué es bueno. Nuestra esposa puede pensar que estamos locos, pero hay que encontrar lo que uno piensa, esto es una película que habla de los ranchos en la actualidad, estoy feliz de que mucha gente lo haya disfrutado”, aseguró respecto a ambos proyectos.
Horizon, de hecho, tendrá tres secuelas, para las que ha invertido más de 38 millones de dólares; muchos lo han criticado por volver a un género cinematográfico que para muchos estaba obsoleto, pero él seguirá reivindicándolo.
La gente me dice ‘¿qué es esto?’, se pregunta por qué lo hago, incluso en mi comunidad, en mi familia, he sido criticado, pero lo que me molestaría más sería no hacerlo, o al menos no intentar seguir haciendo lo que amo”, aseguró.
Pero aunque es tradicionalista en muchas prácticas, no lo es para la tecnología, incluso enfatizó que utilizaría, si es de ayuda, la inteligencia artificial para sus trabajos en cine.
Ojalá pudiera usarla, pero soy muy tonto para usarla, no sé si la usaría, lo que es un hecho, es que está ayudando de muchas formas, incluso podría usarla en mis películas sólo si me ayuda, y también obviamente si ayuda a mis amigos y mi familia la usaré, pero tenemos que saber cuándo es suficiente”, aseguró.
Y no piensa detenerse, ahora incluso ya planea lo que sigue y quizá pueda ser fuera de la industria del cine.
¿Qué voy a hacer? Siempre hay que pensar qué vamos a producir después en esta industria, pero hoy estoy tratando de definir cómo será la segunda parte de mi vida. Si voy bien, por qué querría cambiar, pensarán algunos; pues porque quiero saber cómo quiero que sea la segunda mitad de mi vida, igual y no quiero ser actor, hay que aprovechar al máximo la vida, quizá, haga otra cosa”, dijo.