Dejar de fumar no es fácil, pero sin duda, esta decisión te da una segunda oportunidad de vida al reducir tus posibilidades de desarrollar graves enfermedades. Si estás lista para dar este gran paso, descubre 10 cosas que ganas al dejar de fumar.
¿Qué le pasa al cuerpo al dejar de fumar?
Nuestro cuerpo es tan asombroso que, al dejar de fumar, comienza un proceso de recuperación desde el primer día. De acuerdo con información del Instituto Médico Cleveland Clinic, a los 20 minutos de dejar de fumar, el cuerpo comienza a reparar el daño causado por este hábito.
En pocas horas, disminuyen los niveles de monóxido de carbono y nicotina en la sangre, mejorando la oxigenación de los tejidos. Con el tiempo, se reducen los riesgos de desarrollar enfermedades cardíacas, pulmonares e incluso cáncer.
Por otra parte, dejar de fumar no solo mejora nuestra salud física, sino también la mental, ya que disminuyen los niveles de estrés y ansiedad relacionados con este tipo de hábito. Sí, dejar de fumar hace mucho por tu salud y, si no lo crees, te compartimos 10 cosas que ganas en tu salud:
- Mejora la salud pulmonar: se reduce la tos crónica, mejorando la capacidad pulmonar y la respiración.
- Menor riesgo de enfermedades cardíacas: disminuye el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, hipertensión y arteriosclerosis.
- Mejora de la circulación: la sangre fluye mejor y se reducen las probabilidades de sufrir trombosis o desarrollar coágulos que sean capaces de desprenderse.
- Piel más saludable: la circulación y oxigenación mejoran, lo que da a la piel un aspecto más joven y disminuye el envejecimiento prematuro.
- Reducción del riesgo de cáncer: se reduce significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, boca, garganta y esófago.
- Mejora del sistema inmunológico: el cuerpo se vuelve más eficiente para combatir las infecciones y enfermedades que te debilitan.
- Menor riesgo de enfermedades respiratorias: se reducen las probabilidades de padecer bronquitis crónica y enfisema pulmonar.
- Mejora del sentido del gusto y olfato: al dejar de fumar, ambos sentidos se agudizan, lo que hace que disfrutes más de la comida, así como de tu entorno.
- Ahorro económico: dejar de comprar cigarros representa un ahorro considerable de dinero a largo plazo.
- Mejor calidad de vida: dejar el cigarro te hará sentir con más energía y mejorará tu estado de ánimo.
Como podrás darte cuenta, dejar de fumar tiene muchos beneficios para tu salud a corto y largo plazo. Además del cáncer, una de las enfermedades que podría reducir el riesgo de desarrollar es el EPOC, que causa más de 3 millones de muertes al año y se presenta en el 70% de los casos en fumadores, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Cuáles son los peores días cuando dejas de fumar?
Los peores días para una persona que dejó de fumar suelen ser entre el segundo y el cuarto día, debido a que en este período, los niveles de nicotina en el cuerpo disminuyen excesivamente, causando los famosos síntomas de abstinencia como ansiedad, irritabilidad, dificultad para concentración y fuertes deseos de fumar.
Para superar estos días críticos, es recomendable mantener la mente ocupada, hidratarse adecuadamente y hacer ejercicio para reducir la ansiedad, ya que según el Instituto Médico Mayo Clinic, el deseo de fumar suele desaparecer entre cinco a diez minutos después del antojo de cigarro.
¿Cuánto tiempo tardan en limpiarse los pulmones de un fumador?
El tiempo que tarden en limpiarse los pulmones de un fumador dependerá de la duración de su hábito, la cantidad de cigarros que solía fumar y, lo más importante, su estado de salud. La limpieza de los pulmones puede llevarse a cabo de meses a incluso años.
- En las primeras horas sin fumar, el nivel de monóxido de carbono en la sangre disminuye, mejorando la capacidad pulmonar.
- Entre la segunda y doceava semana, la circulación sanguínea y la función pulmonar aumentan un 30 por ciento.
- Entre los tres y nueve meses sin fumar, disminuye la tos y la dificultad para respirar, mejorando la eliminación de las toxinas pulmonares.
- De uno a dos años, disminuyen las infecciones pulmonares, los bronquios y alvéolos continúan en recuperación.
- De cinco a diez años sin fumar, el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón se reduce casi a la mitad en comparación con un fumador activo, y otros daños a nivel celular se revierten.
Ahora que ya sabes qué ganas al dejar de fumar, comienza hoy a regalarte una segunda oportunidad de vida y despídete del cigarro. ¡Cuídate mucho!
