¿Te llamas Karen? Tu nombre está desapareciendo… en Australia
Así como las "Marías" en México, llamar Karen a una niña era muy común en Australia; ahora, ya no las registran con ese nombre.

En 1963, mientras los Beatles dominaban las listas de éxitos y ocurría el magnicidio a John F. Kennedy, el nombre de Karen se alzaba como el favorito para las niñas nacidas en Queensland, uno de los estados más poblados de Australia. Durante ese año, 537 bebés recibieron este nombre, mientras que el nombre más común para los niños fue David, con 874 registros.
Estos nombres mantuvieron su popularidad durante más de una década. David, en particular, siguió siendo un nombre prominente hasta finales de la década de 1980. Sin embargo, seis décadas después, en 2023, ambos nombres han perdido su atractivo. En el último año, solo 37 bebés fueron nombrados David y no hubo registros de niñas llamadas Karen.
El fenómeno está pasando en todo el mundo, en que muchos nombres clásicos están cayendo en desuso mientras nuevos resurgen con fuerza.
Karen Phillips, una residente de la ciudad Gold Coast nacida en 1963, recuerda en una entrevista con la radiodifusora pública australiana ABC una época en la que el nombre Karen era omnipresente. Algo que también pasaba en muchos países, como México, en que muchas niñas tenían el nombre —o uno de sus nombres— como María.

“Había muchas Karens”, comenta ella. “Era común encontrarlas en fiestas de cumpleaños y eventos escolares”.
Según los registros, la popularidad del nombre Karen alcanzó su punto máximo en 1965, con 639 niñas nombradas así, tan sólo en el estado. Otros nombres femeninos populares en ese tiempo incluían Susan, Julie —Susana y Julia, sus equivalentes en español— Jennifer y Sharon.
No obstante, la moda de estos nombres comenzó a declinar en la década de 1980. Desde 1998, menos de seis bebés han sido nombrados Karen cada año en Queensland. En años como 2002, 2016 y 2023, no hubo ni un solo registro de este nombre.
Phillips se muestra decepcionada por la desaparición de su nombre. A pesar de su descontento, admite que el nombre probablemente ya tuvo su momento de gloria y es poco probable que resurja en popularidad.
“No puedo creer que no haya habido ni una Karen nacida el año pasado en Queensland”, dice.
Mark McCrindle, un investigador social, explica que los nombres de bebés siguen tendencias similares a las de la moda y la gastronomía. “Los nombres de bebés reflejan el contexto cultural y las influencias de la época en la que vivimos”, afirma. Según él, los nombres actuales tienden a ser contemporáneos o inspirados en la tradición familiar.
Señaló que las celebridades y figuras públicas, incluyendo la realeza, a menudo influyen en las tendencias de nombres. “Nombres de niños como David tienden a perdurar más en el tiempo debido a su conexión con la tradición”, comenta. Por otro lado, los nombres femeninos suelen cambiar más rápidamente con las modas.
En 1963, los nombres de niño más populares después de David fueron Peter, Mark, Michael y John —Pedro, Marcos, Miguel y Juan, sus equivalentes en español—. Estos nombres permanecieron en el top 100 hasta 1999. Michael, por ejemplo, todavía es relativamente común hoy en día, ocupando el puesto 80 en 2023.
El profesor emérito Roly Sussex, de la Universidad de Queensland, señala que muchos nombres populares recientes contienen las letras “l” o “r”, conocidas en lingüística inglesa como sonidos líquidos, los cuales se consideran agradables al pronunciarse. Los nombres más populares en 2023 en Australia, Oliver e Isla, cumplen con esta característica, al igual que otros nombres destacados como Charlotte, Henry —Carlota y Enrique, sus equivalentes en español—, Amelia y Olivia.

Jamie y Michael Freeman, padres de una niña llamada Isla, cuentan que eligieron el nombre inspirado en la isla escocesa de Islay, donde se comprometieron.
“Nos encantó el nombre Isla y no sabíamos que sería tan popular”, dicen en la entrevista con la ABC Australia.
A pesar de la caída en popularidad del nombre Karen, Phillips aún se siente orgullosa de su nombre. Reconoce que el término ha adquirido connotaciones negativas en la cultura pop, utilizado en la cultura anglosajona para describir a mujeres con un comportamiento problemático, que en México tiene otro nombre, como “Ladies” y el uso de Karen es más extendido para las dueñas de gatos de mascota.
“Es desafortunado para todas las maravillosas Karens que existen”, lamenta.
Karen Phillips recuerda cómo cambió su percepción del nombre a lo largo de los años. Aunque no le gustaba su nombre cuando era niña, ahora lo valora más. Incluso ha adoptado un apodo, Kaz, para evitar estereotipos negativos en situaciones sociales. Mientras que nombres como Olivia disfrutan de un resurgimiento, Ella concluye con un deseo nostálgico: “Espero que algún día, las Karens vuelvan a ser populares”.