Más de dos décadas en los escenarios le han dejado a Arctic Monkeys la oportunidad de encontrarse como quieran y cuando quieran con sus fans más leales: Así sucedió ayer cuando la banda de Sheffield, Inglaterra, se presentó frente a 65 mil personas —según cifras oficiales— en el Foro Sol en la primera de dos fechas en territorio mexicano como parte de su The Car Tour.
Con un escenario sencillo en donde las pantallas laterales le daban al público la proximidad con la banda, los Arctic Monkeys aparecieron en el entarimado a las 21:17 horas para arrancar su reencuentro con los chilangos dando vida a Sculptures of Anything Goes, con la cual la velada comenzaría a tomar temperatura.
Alex Turner, Jamie Cook, Nick O’Malley y Matt Helders no dudaron hacer que sus fans se prendieran ya con la segunda canción, Brianstorm, en donde las guitarras y la velocidad de la batería hicieron olvidar a todos que el aire estaba frío y que las nubes amenazaban con dejar caer la lluvia… pero antes habría también espacio para que Snap Out Of It hiciera su aparición, siendo la primera rola que ponía a cantar a los presentes.
La frialdad de los Arctic Monkeys podría derretir a cualquiera, su peculiar sonido indie y los poco más de 20 años de experiencia en los escenarios se sienten en cada nota, como pasó con Don’t Sit down ‘Cause I’ve Moved Your Chair, Turner cantaba el tema haciendo un viaje hasta 2011.
Muchas gracias”, lanzó el vocalista y sin dar oportunidad al intercambio de energía, Teddy Picker tomó vida, al igual que Crying Lightning, las cuales hicieron saltar al público que trataba, al mismo tiempo, de grabar el momento en sus celulares para revivirlo en un futuro.
Arctic Monkeys ha crecido y de la misma forma sus fans… aquellos que asistieron en 2010 a la caótica primera presentación de los británicos en la explanada del Estadio Azteca, donde las barricadas que separaban las secciones general de la preferente desaparecieron, ahora acompañaban a sus hijos adolescentes a disfrutar de temas como Tranquility Base Hotel + Casino y Why’d You Only Call Me When You’re High?
¿Cómo se sienten todos?”, preguntó el vocalista para recibir una ovación como respuesta que, sin duda, manifestaba que el público disfrutaba del show, uno de esos que ahora ya caen en la categoría de vieja escuela donde la producción no es más vistosa que el talento y la música.
Las gradas se encendieron con las luces de los celulares, mientras que en las secciones general A y B hubo quienes también se unieron a esa ya añeja tradición de encender un porrito de mariguana para hacer la experiencia todavía mejor, mientras Arabella, esa inquietante mujer que inspiró la canción, tomaba el control del lugar.
Arctic, Arctic, Arctic”, se escuchaba gritar a las personas más cercanas al escenario, a quienes les respondieron su petición con Perfect Sense, un tema de su más reciente disco, The Car, el cual da nombre a la gira, y en el que las estrellas —en forma de luces de teléfonos— iluminaron todo el recinto.
Turner y compañía no iban a dejar pasar la oportunidad de mostrar sus raíces de garage punk, así que no dudaron en darle a sus fans una dosis de pasado nostálgico con The View From The Afternoon y Knee Socks, de su disco AM, de 2013.
Uno de los discos más mediáticos de los Arctic es sin duda Humbug, de 2009, —el mismo con el que vinieron por primera vez a México— y era obvio que en este regreso debía haber un vistazo a esta producción, el cual llegó con Pretty Visitors.
Esos veinteañeros que enloquecieron a sus fans en la explanada del Azteca hace 13 años, lo siguen haciendo… ahora de una forma más madura, en donde la energía juvenil se ha canalizado en un show mucho más fino y, sobre todo, con muchos más detalles, como un escenario incendiado en rojo y enloquecido con estrobos blancos al ritmo de Fluorescent Adolescent y There’d Better Be A Mirrorball.
Así, con Turner en el piano, llegó el turno de 505, un canción que tuvo a la gente atenta y disfrutando, pero que funcionó como un puente para un shot de energía que desató Do I Wanna Know?, uno de sus temas más exitosos.
Qué público más maravilloso, es increíble”, lanzó Alex Turner a sus seguidores a manera de agradecimiento antes de robarles un gran grito cuando las primeras notas de Body Paint se hicieron presentes.
Tras una breve salida del escenario, que parecía el momento para que algunos decidieran irse, los Arctic Monkeys volvieron sólo para calentar a aquellos que desafiaban el aire frío con Hello You, I Bet You Look Good on the Dancefloor y R U Mine?, con la cual dijeron adiós de manera temporal hasta que hoy vuelvan a derretir el Foro Sol.
