El pasado sábado, un grupo de pescadores descubrió flotando en las aguas del río Bravo, en el lugar conocido como El Acueducto, el cuerpo sin vida de un hombre vestido con un short blanco. La víctima, que presentaba signos de haber sido carcomida posiblemente por aves de rapiña, aún no ha sido identificada debido a la falta de documentos y su avanzado estado de descomposición.
Con este hallazgo, el número de personas fallecidas por ahogamiento en el río Bravo asciende a 23, a lo que se suma una víctima encontrada en el río Escondido. La mayoría de los cuerpos no han sido identificados, lo que ha generado una gran preocupación en la comunidad local.
Las autoridades han iniciado una investigación para tratar de determinar la identidad de la víctima y las circunstancias de su muerte. Mientras tanto, se recomienda a la población evitar ingresar al río en zonas peligrosas y extremar precauciones para evitar accidentes.
