Chechenia, Siria y Ucrania con huellas de crueldad rusa; circulan actos de violencia
El video de la decapitación de un prisionero de guerra recuerda actos similares por parte de combatientes rusos en otros países y fueron posibles gracias a la impunidad, denuncian expertos

Desde que comenzó la guerra en Ucrania, los videos de atrocidades atribuidos a los rusos siembran pánico, recordando incluso a los yihadistas, pero los defensores de derechos humanos apuntan especialmente a la impunidad reinante desde hace décadas en las fuerzas rusas.
El video publicado hace unos días de la decapitación de un presunto prisionero de guerra ucraniano por un verdugo rusohablante provocó horror internacionalmente, con reacciones evocando los métodos hasta ahora asociados al grupo Estado Islámicos (EI), que grababa los asesinatos de sus rehenes.
“Si se confirma la autenticidad de este acto bárbaro, los soldados rusos estarían del lado del EI”, tuiteó el presidente checo, Petr Pavel.
Por su parte, el jefe de la diplomacia ucraniana, Dmytro Kuleba, opinó que Rusia era “peor” que ese grupo yihadista.
No se trata del primer video sanguinario. Desde el comienzo del conflicto circularon imágenes mostrando una castración, un prisionero abatido o cuerpos de soldados mutilados.
“No sabemos cuándo o dónde fue tomado este video (de decapitación), es imposible determinar en este momento quiénes son los autores, pero hay un contexto”, indicó Alexander Cherkasov, director del centro de derechos humanos de la ONG rusa Memorial, vetada en su país.
“Hubo precedentes, particularmente en Chechenia, donde se hallaron decenas de cuerpos decapitados, entre las miles de desapariciones forzadas de chechenos durante la segunda guerra (1999-2000)”, dijo.
“También está el video sirio”, agregó en referencia a la tortura y asesinato de un desertor del ejército sirio grabados en 2017, que dio lugar a la primera denuncia contra el grupo paramilitar ruso Wagner en 2021.
Ésta se encuentra actualmente ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
“Hay un mecanismo de impunidad que funciona desde la primera guerra de Chechenia (1994-1996)”, considera Cherkasov. “Los responsables rusos, ya sean del ejército, de servicios especiales o de Wagner, quedan impunes y tienen la certeza de esta impunidad”.
Un informe de Memorial revela que los conflictos chechenos, sirio y ucraniano “a veces implicaron a los mismos actores, a las mismas unidades y formaciones militares” y describe “una cadena de guerras, de crímenes y de impunidad”.
Para Mazen Darwish, fundador del Centro Sirio para los Medios y la Libertad de Expresión, “como no hubo reacción de la comunidad internacional ante lo que pasaba en Siria, hoy tenemos esta situación en Ucrania”.
Su ONG formaba parte de las asociaciones que presentaron la denuncia contra Wagner. “Al rechazarla, la justicia dio luz verde a los que sabían que nunca serían perseguidos”, dijo Darwish, que vio “el horrible” video en Ucrania.
Se trata de criminales, pero también de individuos “rotos psicológicamente”, que desarrollaron una alta tolerancia a la violencia tras años en prisiones rusas donde la tortura, las violaciones y el aislamiento son comunes, recordó recientemente una jurista rusa, Yana Gelmel, en una conferencia de Memorial en París.
Lula lleva a Portugal su plan de paz
LISBOA.— El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió ayer en la necesidad de una paz “negociada” entre Rusia y Ucrania, al iniciar una visita a Portugal, que expresó su discrepancia con una iniciativa que puede “beneficiar al infractor”.
Lula volvió a defender esa postura, en un juego de equilibrista que ya le valió críticas por parte de Estados Unidos e incomprensiones en Europa.
“Al mismo tiempo que mi gobierno condena la violación de la integridad territorial de Ucrania, defiende una solución política negociada del conflicto”, declaró el ícono de la izquierda latinoamericana en Lisboa, tras reunirse con su homólogo portugués, Marcelo Rebelo de Sousa.
“Necesitamos urgentemente que un grupo de países se siente a negociar tanto con Ucrania como con Rusia para buscar la paz”, subrayó Lula.
“La posición de Portugal es diferente”, puntualizó el mandatario de ese país miembro de la Unión Europea y de la OTAN y uno de los primeros en suministrar tanques a Kiev.
“El presidente Lula considera que el camino hacia una paz justa y duradera supone priorizar la vía de la negociación”, dijo Rebelo de Sousa.
Pero “la posición portuguesa es diferente: sostiene que un eventual camino hacia la paz supone el previo derecho de Ucrania a reaccionar a la invasión, recuperando lo que pueda o quiera recuperar (…) de su integridad territorial”, afirmó.
— AFP